viernes, 29 de enero de 2021

METACOGNICION

Cognición, metacognición, autorregulación, aprender a aprender, términos relacionados y que, bien combinados, pueden formar un cóctel educativo inigualable para nuestros estudiantes. Agitado, pero no revuelto.
Muchos autores sitúan la cuna del término metacognición a finales de los años 70, exactamente se lo atribuyen a H. Flavell. Entre las muchas características de esta habilidad que sirven para definirla, se suelen comentar las siguientes:

-Supone reflexionar sobre el propio aprendizaje.

-Es pensar sobre el pensamiento.

-Es traspasar el aprendizaje memorístico y buscar la comprensión.

-Es aprender a aprender y aprender a pensar.

-Supone ser consciente de tus propios procesos de aprendizaje.

-Implica conocer tus puntos fuertes y débiles.
La metacognición ayuda a los alumnos a ser autónomos en su aprendizaje y a mantener una actitud crítica sobre la información, sobre el conocimiento y sobre sus propias estrategias de aprendizaje.

Se fomenta un aprendizaje significativo, un aprendizaje en el que el por qué, el cómo y el para qué cobran sentido para los estudiantes. Se trata de ser conscientes de qué se quiere aprender, por qué, para qué, cómo, lo que nos va a costar, qué estrategias deberemos seguir para lograrlo y, una vez aprendido, poder evaluar y mejorar para futuros aprendizajes.

martes, 26 de enero de 2021

TIPS DE APRENDIZAJE

TIPS PARA UN BUEN APRENDIZAJE

 1. Estudia en sesiones de 25-30 minutos.

No hay nada menos efectivo que estudiar por largas jornadas sin pausas. Un estudio de la Universidad de Michigan determinó el período de concentración óptima de los estudiantes, a partir de la media hora de lectura, los investigadores hallaron que los alumnos comenzaban a distraerse y su entendimiento del texto comenzaba a verse resentido.

Tomar un pequeño descanso de cinco minutos cada media hora sirve para concentrarse y recargar energía luego de una bloque de estudio efectivo. Se recomienda realizar una actividad gratificante durante esta pausa.

 

2. Crea un espacio únicamente destinado al estudio

Pocas personas disponen de una habitación exclusivamente dedicada a la lectura. La mayoría estudia en su habitación, en la sala de estar o en la mesa de la cocina. Sin embargo, estar cerca de la cama o de espacios de recreación puede aumentar drásticamente las posibilidades de distraerte.

Se recomienda estudiar en un escritorio especialmente destinado al estudio, en el que no puedas tener contacto visual con ninguno de estos objetos. Una vez que se termine tu media hora de estudio, debes abandonar ese escritorio, y solo volver cuando estés listo para comenzar de nuevo.

 

3. Estudia de forma activa

Hay una diferencia en aprender datos, como el nombre de un músculo o un deportista popular, y aprender conceptos, como la función de ese músculo. Muchos estudiantes intentan memorizar y repetir datos y conceptos por igual. Pero la realidad es que los conceptos son más importantes, porque una vez que los entiendes nunca te los olvidarás.

En primer lugar, debes preguntarte si lo que estás por estudiar se trata de un dato o un concepto. Si es un concepto, la mejor manera de asegurarte de que lo has aprendido es explicarlo con tus propias palabras. En lugar de revisar lo que has resaltado en el texto, debes ponerte a prueba a ti mismo.

4. Toma buenos apuntes

Al terminar la clase, debes revisar tus notas y complementarlas con información adicional o consultar con un compañero o el docente si no has entendido algo del todo bien. 

5. Enséñale a alguien lo que has aprendido

Si eres capaz de enseñarle a alguien un concepto, significa que realmente lo has aprendido. Además podrás identificar las debilidades en tu entendimiento con más facilidad.  

 

6. Utiliza bien los libros de texto

No te conformes solo con leer, ya que esto no es suficiente. Haz una lectura rápida del capítulo, cuestionarte a ti mismo si lo has entendido, volverlo a leer, recitar y repasar.  

 

7. Utiliza recursos mnemotécnicos para aprender datos

Aprender datos puede resultar más sencillo que aprender conceptos, pero es posible que se escapen de la memoria rápidamente. Por este motivo, se recomienda convertirlos en siglas, frases hechas, rimas o asociarlos con imágenes. De esta manera los recordarás con facilidad.

viernes, 22 de enero de 2021

¿Qué sucede en nuestro cerebro cuando aprendemos?

Nuestro cerebro trabaja mediante un ciclo de aprendizaje que se puede generalizar, pero que como todos sabemos puede variar debido a que cada persona es un ser único.

Una de las teorías acerca de cómo aprende nuestro cerebro fue formada por James Zull[1], y consta de cuatro procesos que se llevan a cabo en diferentes áreas del cerebro humano.

El primer proceso se da en las cortezas sensoriales, como su nombre lo indica consta de la captación de información a través de los sentidos, como una primera experiencia del mundo exterior.

El segundo proceso consta de la significación de las experiencias, es decir, realizar reflexiones y encontrar en nuestra cabeza una definición o un conjunto de características para aquello que estamos percibiendo. Este proceso se da en el lóbulo temporal, y lleva un tiempo determinado dependiendo de la cantidad de información.

En el córtex prefrontal tiene lugar el tercer proceso, consta de la creación de conocimiento a través de la abstracción y las relaciones conceptuales. Esta parte del cerebro se ocupa de la toma de decisiones y de ahí deviene su importancia, parte de la educación comunicativa consiste en el entrenamiento cerebral para la toma de decisiones productivas frente a los problemas cotidianos.

Por último, el cuarto proceso consiste en llevar a la práctica aquellas abstracciones, la corteza motora se encarga de aplicar lo aprendido en acciones físicas.

El cerebro es un órgano que podemos ejercitar toda la vida. Cuando aprendemos se ilumina, aumentan las conexiones sinápticas, y las ondas cerebrales pasan por diferentes partes del cerebro, estimulándolo. Continuar aprendiendo todos los días le otorga plasticidad a este órgano fundamental, y con ella aumentan las emociones positivas, la toma de decisiones más reflexionadas y el sentimiento de utilidad como ser humano, proceso que nos mantiene vivos psicológicamente.

Para el buen aprendizaje uno de los procesos más necesarios y que nos acompaña a lo largo de nuestra vida, es la lectura. Tres regiones del hemisferio izquierdo de nuestro cerebro se ponen en funcionamiento cada vez que desciframos un texto: el área occipital, la circunvolución frontal inferior y el área parieto-temporal nos permiten la conciencia fonológica necesaria para la comprensión lectora. La conciencia fonológica, consiste en distinguir las unidades básicas de las palabras (las sílabas), y representarlas mediante un sonido en nuestra mente, logrando así la compresión total de una lectura de corrido.

¿Qué sucede cuando el proceso neurológico de lectura no se logra con eficiencia?

Cuando un niño no puede leer y comprender en su totalidad los conocimientos, sin estar hablando de causas económico-sociales ni de integración, posee lo que se conoce como “Dislexia”. Esta enfermedad, en parte genética y con motivos neurológicos es una de las principales causas de las dificultades de aprendizaje.

Adentrándonos de lleno en el tema, podemos comentar acerca de las teorías que surgieron para explicar las causas de la dislexia. Albert Galaburda[2] fue quien observó que en los cerebros de las personas disléxicas existía un patrón que puede ser la causa puntual. Las neuronas, células fundamentales del sistema nervioso, se encuentran “apoyadas” por lo que se conoce como células gliales, que cumplen funciones nutricias y de sostén. Galaburda observó que en el caso de quienes padecían dislexia, un grupo de células debiendo formar parte de la corteza cerebral, en el periodo de formación del feto, continuaron hacia la parte externa de ésta, formando lo que se conoce como “ectopia”, es decir una anomalía en la que neuronas y células gliales se agruparon en el lugar incorrecto.

Se estiman causan genéticas debido a que quien “dice” a donde es que debe estar cada neurona son los genes, por lo que debería haber una falla de orden genético para que esto suceda. Según estudios de Galaburda, esa falla estaría presente en el cromosoma 15.

Estas afecciones provocan la disminución de la activación de las regiones involucradas en los procesos de lectura, ralentizando o incluso impidiendo la compresión, el habla fluida, y la escritura de producción propia.

miércoles, 20 de enero de 2021

NEUROAPRENDIZAJE

El neuroaprendizaje es una disciplina que combina la psicología, la pedagogía y la neurociencia para explicar cómo funciona el cerebro en los procesos de aprendizaje. En la actualidad, se cuenta con elementos para saber cómo aprende el cerebro humano en general y se tienen herramientas para descubrir cómo aprende cada cerebro individual. Estas herramientas posibilitan cubrir todos los estilos de aprendizaje, todas las inteligencias, los distintos canales de representación sensorial y formas de enfrentar desafíos. Existen períodos sensibles en el desarrollo cognitivo del ser humano relacionados con el aprendizaje, el cual se da en las primeras etapas de la vida, que van desde el nacimiento hasta los tres años donde se considera que se crean más conexiones sinápticas, sin embargo, este período se extiende hasta los diez años. Agrega Loja (2015) que un ejemplo de esto es la facilidad para aprender los diferentes idiomas entre otros, sin embargo la neurogénesis ha demostrado que todos pueden aprender en cualquier momento de la vida. Como punto de partida para vincular cerebro y aprendizaje, se debe empezar por conocer algunas características fundamentales del cerebro humano. El proceso de aprendizaje involucra todo el cuerpo y el cerebro, quien actúa como una estación receptora de estímulos y se encarga de seleccionar, priorizar, procesar información, registrar, evocar, emitir respuestas motoras, consolidar capacidades, entre otras miles de funciones. El proceso de desarrollo cerebral es gradual y por ello las propuestas de aprendizaje deben ir de lo más simple y concreto a lo más abstracto y complejo. Dentro de los procesos cerebrales implicados en el aprendizaje que se ponen en funcionamiento cuando el hombre observa, lee, escucha, mira son: percepción, atención, pensamiento, memoria, lenguaje. Al respecto Fuenmayor (2008), aclara que los procesos cognitivos desempeñan un papel fundamental en la vida diaria. El hombre, todo el tiempo, está percibiendo, atendiendo, pensando y utilizando la memoria y el lenguaje. Juntos, estos procesos cognitivos constituyen la base a partir de la cual se entiende el mundo. También subyacen al funcionamiento cognitivo más sofisticado como lo es la lectura, la comprensión social o las creencias. Cuando se habla de neuroaprendizaje no se puede dejar de hablar de las emociones, y específicamente, de la inteligencia emocional (IE), término propuesto por Goleman (2009). Este concepto va en contraposición con el de cociente intelectual (CI), puesto que la IE prepara al individuo para las situaciones de convivencia, adaptación, regulación del humor, manejo de los impulsos entre otros, mientras que el CI, es la inteligencia académica. No obstante, las dos son básicas para el aprendizaje y no se debe desconocer especialmente la IE, en los procesos de enseñanza. Lo que importa no es solo el CI sino la IE. Goleman (2009) asegura que el intelecto no puede operar de manera óptima sin inteligencia emocional. Generalmente, la complementariedad del sistema límbico y la neocorteza, de la amígdala y los lóbulos pre frontales, significa que cada uno de ellos es un socio pleno de la vida mental. Cuando estos socios actúan positivamente, la inteligencia emocional aumenta, lo mismo que la capacidad intelectual. Uno de los secretos a voces de la psicología es la relativa incapacidad de las notas, del CI o las pruebas de actitud académica, para predecir de manera infalible quien tendrá éxito en la vida. Existen muchas excepciones a la regla de que el CI predice el éxito, más excepciones que casos que se adaptan a la misma. Con relación a las emociones, Lupón, Quevedo y Torrens, (2009), agregan, que el proceso emocional se inicia con la percepción de cambios en la situación externa o interna del sujeto (desencadenantes emocionales), que son procesados por un primer filtro de evaluación afectiva. Éste produce como consecuencia inmediata una reacción que incluye una expresión corporal, una tendencia a la acción y unos cambios fisiológicos. Un segundo filtro (evaluación cognitiva), muy influenciado por el aprendizaje y la cultura, modifica esta reacción afectiva dando como resultado la respuesta observable. La sede cerebral de las emociones se halla en el sistema límbico, también llamado cerebro medio. Esta parte del cerebro es una de las más primitivas y se sitúa inmediatamente debajo de la corteza cerebral. Comprende centros como el hipotálamo, el hipocampo y la amígdala cerebral. El hipotálamo regula el hambre, la sed, el placer, el dolor o la ira y, además, regula el sistema nervioso simpático y parasimpático. El hipocampo tiene un papel muy importante en la construcción de la memoria. Finalmente, el papel de la amígdala como centro de procesamiento de las emociones es hoy incuestionable. Los sujetos que tienen lesiones en esta zona no reconocen las expresiones faciales de las emociones, en animales experimentales cuando la amígdala se extirpa, estos se vuelven dóciles e indiferentes a ciertos estímulos y, por el contrario, su estimulación produce agresividad. Los estudios demuestran que los procesos emocionales son inseparables de los cognitivos. Contextos emocionales positivos facilitan el aprendizaje y la memoria, mediante la activación del hipocampo; por el contrario, estímulos negativos activan la amígdala, dificultándolo. Esto sugiere la necesidad de generar climas emocionales positivos en el aula que favorezcan el aprendizaje y en los que se asuma el error de forma natural y se proporcionen retos adecuados (Goleman, 2006). Al respecto, se puede afirmar que los sentimientos y las emociones tienen un rol vital en el aprendizaje, la motivación permite que haya una relación entre la capacidad para prestar atención y por ende para aprender. Cuando los sentimientos son ignorados pueden sabotear el aprendizaje, la memoria de trabajo y de atención.



martes, 19 de enero de 2021

TIPOS DE APRENDIZAJE.

EXISTEN 13 TIPOS DE APRENDIZAJE. 
1. Aprendizaje implícito
El aprendizaje implícito hace referencia a un tipo de aprendizaje que se constituye en un aprendizaje generalmente no-intencional y donde el aprendiz no es consciente sobre qué se aprende.
2. Aprendizaje explícito
El aprendizaje explícito se caracteriza porque el aprendiz tiene intención de aprender y es consciente de qué aprende.
3. Aprendizaje asociativo
Este es un proceso por el cual un individuo aprende la asociación entre dos estímulos o un estímulo y un comportamiento. Uno de los grandes teóricos de este tipo de aprendizaje fue Iván Pavlov, que dedicó parte de su vida al estudio del condicionamiento clásico, un tipo de aprendizaje asociativo.
4. Aprendizaje no asociativo (habituación y sensibilización)
El aprendizaje no asociativo es un tipo de aprendizaje que se basa en un cambio en nuestra respuesta ante un estímulo que se presenta de forma continua y repetida. 
5. Aprendizaje significativo
Este tipo de aprendizaje se caracteriza porque el individuo recoge la información, la selecciona, organiza y establece relaciones con el conocimiento que ya tenía previamente. 
6. Aprendizaje cooperativo
El aprendizaje cooperativo es un tipo de aprendizaje que permite que cada alumno aprenda pero no solo, sino junto a sus compañeros.
7. Aprendizaje colaborativo
El aprendizaje colaborativo es similar al aprendizaje cooperativo. Ahora bien, el primero se diferencia del segundo en el grado de libertad con la que se constituyen y funcionan los grupos.
8. Aprendizaje emocional
El aprendizaje emocional significa aprender a conocer y gestionar las emociones de manera más eficiente. 9. Aprendizaje observacional
Este tipo de aprendizaje también se conoce como aprendizaje vicario, por imitación, y se basa en una situación social en la que al menos participan dos individuos: el modelo (la persona de la que se aprende) y el sujeto que realiza la observación de dicha conducta, y la aprende.
10. Aprendizaje experiencial
El aprendizaje experiencial es el aprendizaje que se produce fruto de la experiencia, como su propio nombre indica. Esta es una manera muy potente de aprender. De hecho, cuando hablamos de aprender los errores, nos estamos refiriendo al aprendizaje. 
11. Aprendizaje por descubrimiento
Este aprendizaje hace referencia al aprendizaje activo, en el que la persona en vez aprender los contenidos de forma pasiva, descubre, relaciona y reordena los conceptos para adaptarlos a su esquema cognitivo. 
12. Aprendizaje memorístico
El aprendizaje memorístico significa aprender y fijar en la memoria distintos conceptos sin entender lo que significan, por lo que no realiza un proceso de significación. Es un tipo de aprendizaje que se lleva a cabo como una acción mecánica y repetitiva.
13. Aprendizaje receptivo
Con este tipo de aprendizaje denominado aprendizaje receptivo la persona recibe el contenido que ha de internalizar.



lunes, 18 de enero de 2021

¿Qué es el aprendizaje?

¿Qué es el aprendizaje?
El aprendizaje es recibir información, asimilarla, nuestro sistema cognitivo la acomoda y se da la adaptación por medio de la experiencia. Para aprender hay muchas cosas que influyen, como: percepción, atención, estímulos, nuestros sentidos, el ambiente y la memoria. Entonces el aprendizaje es el resultado del contexto donde el individuo se desenvuelve. 
Para Piaget el aprendizaje es un proceso que mediante el cual el sujeto, a través de la experiencia, la manipulación de objetos, la interacción con las personas, genera o construye conocimiento, modificando, en forma activa sus esquemas cognoscitivos del mundo que lo rodea.

"El aprendizaje es el cambio relativamente permanente en el conocimiento de una persona o comportamiento debido a la experiencia. Esta definición tiene tres componentes: 1) la duración del cambio es a largo plazo y no a corto plazo; 2) el locus del cambio es el contenido y la estructura del conocimiento en la memoria o el comportamiento del alumno; 3) la causa del cambio es la experiencia del alumno en el medio ambiente en lugar de la fatiga, la motivación, las drogas, condición física o fisiológica intervención. "

De "Learning in Encyclopedia of Educational Research" de Richard E. Mayer.

sábado, 16 de enero de 2021

aprendizaje: llegar a saber


Soy Gabi, estudiante UNACH en la licenciatura de pedagogía y en este espacio compartiré sobre lo que es el aprendizaje. Aprender comprende la adquisición y la modificación de conocimientos, habilidades, estrategias, creencias, actitudes y conductas. El aprendizaje nos lleva a conocer, el conocer a saber y el saber a la inteligencia. 

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